jueves, 31 de mayo de 2012

Discurso: Heinz Hess


Hna. Directora.
Profesores/as.
Padres y apoderados/as.
Queridos/as compañeros/as.
Público en general.

Estamos reunidos hoy para cerrar un capítulo más en nuestras vidas, este proceso que nos dejara miles de recuerdos, los mejores.

Y ¿Cómo termina este capitulo?
Recordemos pues nuestra infancia, esos momentos de nuestra niñez en la cual no existía el miedo y lo único que importaba era pasarlo bien jugando con nuestros/as  amigos/as, ser felices.

¡Cómo pasa el tiempo!, quién nos viese ahora con dieciocho años de edad la mayoría, terminando este proceso, para algunos abrupto y rápido, porque el tiempo no podemos manejarlo , este se nos escapa, estamos  al final de una etapa , la más bonita y recordada según nuestros padres y profesores/as.
Y ¿Cómo termina esta historia?
Con nosotros aquí  en nuestras propias sillas donde nos sentábamos día a día. Se termina invadiéndonos miles de sentimientos de tristeza, angustia, miedo, de separarnos de nuestros compañeros/as, amigos/as, profesores, pero más que solo personas, nuestra familia y nuestro segundo hogar según dicen algunos  y que mucha razón tienen al decirlo. Nos invade la alegría y nostalgia de tantos momentos que nunca mas volverán. 

¿Qué quedará al final de este viaje?
muchos recuerdos sin duda, buenos y malos. Por ejemplo los regaños de nuestros profesores, pero siempre con la mejor intención, de hacernos mejores personas, nunca descuidando los valores cristianos inculcados por nuestro colegio, las discusiones que teníamos por distintas opiniones que existían, que en cualquier grupo es normal, o por no poder ponernos de acuerdo con algo, pero que en este momento y sin duda alguna no importan. Como olvidar esos momentos en que llorábamos, pero de risa por alguna situación o chiste contado por alguno de nuestros compañeros, las fiestas, los campeonatos de fútbol en los cuales el curso entero se unía para apoyar a esos seis gladiadores. 

Nos quedaremos pues con los buenos momentos y resignarnos a que esta historia acabó, porque todo tiene un fin, quien sabe si el tiempo nos volverá a unir y si cada uno alcanzará las metas o sueños que tenemos. Solo el tiempo lo dirá.

Por ahora, solo queda agradecerle a nuestro colegio, a cada uno de sus funcionarios: auxiliares, profesores, directora, y tantos otros que hicieron posible esta historia. Gracias por su inmensa labor que desempeñan y por creer en nosotros, a nuestros padres por entregarnos todo lo que necesitamos día a día.
Gracias a ustedes compañeros/as, amigos/as por ser parte de este, nuestro sueño, por existir  y por ser parte de esta familia.
Hasta siempre queridos amigos ojalá el tiempo no borre esos momentos tan hermosos que vivimos y ojalá sea el mismo tiempo el que nos vuelva a unir, Gracias.

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